sábado. 20.04.2024
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Los últimos datos de la Agencia Europea del Medicamento indican que Chipre, España e Italia se encontraban a la cabeza de los países con las mayores ventas de antibióticos destinados al uso en granjas

Para evitar el desarrollo de bacterias resistentes a los antibióticos, es necesario que la Unión Europea adopte normas que aborden el uso de antibióticos en las granjas. Para conseguirlo, OCU, junto a otros países miembros de la Asociación de Consumidores Europea (BEUC), ha puesto en marcha una campaña que, además de abogar por una serie de medidas contra este problema, informe y conciencie a todos los ciudadanos del riesgo que supone la resistencia a los antibióticos.

Según la Agencia Española de Medicamentos, cada año mueren en Europa 25.000 pacientes por infecciones causadas por bacterias resistentes- también llamadas superbacterias- que no pueden eliminarse con antibióticos. Estas víctimas pueden reducirse, por un lado, controlando el uso de antibióticos en las personas y, por otro, moderando la administración de los mismos a los animales de granja, usándolos solo cuando sea necesario.

OCU recuerda que, bajo la normativa actual, pollos, cerdos o vacas sanos pueden recibir antibióticos con carácter puramente preventivo, o antibióticos que son de vital importancia para las personas. Para la Organización, si estas prácticas dañinas continúan sin ser revisadas, la resistencia a los antibióticos pronto alcanzará un punto de no retorno y algunas infecciones hasta ahora controladas podrían volverse mortales de nuevo.

En 2014, la Comisión Europea puso en marcha un plan para actualizar la legislación europea sobre medicamentos veterinarios, y en el que se incluyeron medidas para frenar el uso de antibióticos.  Aunque el Parlamento Europeo votó a favor de este plan el año pasado, BEUC, de la que OCU forma parte, urge a los Estados Miembro a llegar cuanto antes a un acuerdo que permita actualizar la normativa vigente.

Hasta la fecha, las actuaciones para reducir el uso veterinario de antibióticos han sido desiguales en los diferentes países de la Unión Europea. Los últimos datos de la Agencia Europea del Medicamento indican que Chipre, España e Italia se encontraban a la cabeza de los países con las mayores ventas de antibióticos destinados al uso en granjas. En contraposición, Dinamarca, Suecia, Lituania y Noruega mostraban ventas muy inferiores.

Según OCU, el cambio es posible y por eso la Organización de Consumidores apuesta por ello. De hecho, los países que ya han llevado a cabo medidas para reducir el uso de antibióticos en animales de granja, como Países Bajos y Francia, han conseguido logros extraordinarios en tan solo unos años.

Sin embargo, tanto OCU como el resto de las organizaciones de consumidores miembros del BEUC, alertan de que las superbacterias cruzan fronteras, por lo que las medidas ejemplares de un país pueden atenuar su impacto si el resto de los Estados Miembro no actúan. Por eso es necesario que todos los países se pongan de acuerdo y aprueben urgentemente la ley propuesta para abordar el uso indebido de antibióticos veterinarios en toda la Unión Europea.  

De forma específica y mediante el apoyo de los consumidores a través de su campaña “Bacterias Resistentes no, gracias”, OCU pide que: 

-Se cambie la normativa vigente, de forma que solo se permita el uso de antibióticos en animales enfermos.

-Se reserven para uso exclusivamente humano, y nunca se utilicen en las granjas, determinados antibióticos para los que todavía no hay resistencias y evitar de esta manera que aparezcan. 

-Se refuercen los controles para supervisar el cumplimiento de la normativa.

-Se mejoren las prácticas de higiene y cuidado de los animales en las granjas, con lo que se reduciría la necesidad de recurrir a los antibióticos.

Las 'superbacterias' causan 25.000 muertes al año en Europa