jueves. 18.04.2024
LA AUSENCIA DEL PRESIDENTE MARCA UN DEBATE HISTÓRICO

El ‘tripartito’, la amenaza fantasma de Rajoy en Doñana y argumento de Sáenz de Santamaría

Los candidatos Sánchez, Rivera e Iglesias no se mojan con los posibles pactos poselectorales, mientras que Santamaría apela a que gobierne la lista más votada.

debate atresmedia

Los candidatos a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez (PSOE), Albert Rivera (Ciudadanos) y Pablo Iglesias (Podemos) midieron anoche sus fuerzas en el debate en Atresmedia donde la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría acudió en representación del candidato del PP Mariano Rajoy que siguió el debate desde Doñana. Igual que ya hiciera horas antes su jefe de filas, la número dos del Ejecutivo advirtió del posible tripartito tras las elecciones del 20 de diciembre para desbancar al PP aunque este extremo no quedó en modo alguno aclarado por ninguno de los principales protagonistas.

La 'número dos' del PP por Madrid garantizó que su partido no intentará formar gobierno si no gana las elecciones. Mientras tanto, Sánchez, Rivera, e Iglesias no desvelaron sus estrategias en materia de pactos electorales. Ni Sánchez, ni Rivera ni Iglesias quisieron ponerse en otro escenario que el de una victoria en las urnas. Eso sí, Rivera e Iglesias recalcaron que el Gobierno lo conforma quien logra más apoyos parlamentarios.

Rivera afirma que no apoyará ni a Rajoy ni a Sánchez

El primero en ser preguntado por este asunto fue Albert Rivera, quien nada más comenzar el debate quiso dejar claro que "estamos aquí para debatir quién gana, si ya sabemos el resultado, me voy", dijo de entrada. El líder de la formación ‘naranja’ dejó claro que sale a ganar, que quiere tener la iniciativa de formar gobierno y que si no lo consigue permanecerá en la oposición. "No apoyaremos la investidura ni de Pedro Sánchez ni de Mariano Rajoy, que no está aquí, pero como si estuviese", ha dicho. "Tengo decidido que no voy a estar en el proyecto ni del señor Sánchez ni del señor Rajoy", reiteró.

Rivera explicó que es el momento de "abrir una nueva etapa política" y defendió que esto no lo garantiza ni el proyecto de Rajoy ni el de Sánchez. Dicho esto, dijo que, si gana las elecciones, está dispuesto a liderar "un gobierno de apertura", que se pueda "abrir" a independientes e incluso a miembros de otros partidos, como el PP y el PSOE. "Espero que me dejen gobernar la lista más votada", ha dicho, cuando se le ha insistido en si respetará que sea el partido que gane el que forme el Ejecutivo. Después, ha concedido que habrá que esperar que quien tenga más apoyos en las urnas "intente formar gobierno", porque esta es la "regla de la democracia". Y así lo harán, ha dicho, si ganan las elecciones y si es otro, ha asegurado que no van a "bloquear" que intente formar gobierno. "Pero si no puede, tiene que haber alternativas", dijo.

Sánchez alerta de que C's gobernará con el PP

Por su parte, Pedro Sánchez tuvo que responder a por qué su partido no recoge los votos que ha perdido el PP, según las encuestas, en estos cuatro años de legislatura. ¿No le preocupan los sondeos? "Al contrario, me anima", dijo. El dirigente socialista aseguró que su proyecto es el "único" alternativo al PP, porque Podemos no puede ganar -"creo que Pablo Iglesias ya lo tiene interiorizado", se jactó-, y si Ciudadanos puede sumar con el PP, "si suman, gobernarán desde la derecha". "Quiero que les quede claro a los españoles que el único camino del cambio es el PSOE", remarcó.

El líder del PSOE negó que haya planteado un tripartito con Podemos y Ciudadanos si gana el PP y insistió en que "la única garantía de cambio", para que Rajoy no sea presidente, es que gane el PSOE. Sánchez defendió que "es más que evidente" que Podemos "no va a ganar" y que desde las elecciones del 24 de mayo se sabe que, cuando suman "las derechas", Ciudadanos "siempre ha apoyado al PP". Así ha ocurrido, dijo, en Castilla y León, La Rioja, la Comunidad de Madrid y Murcia. Porque el "problema" que tuvo en Andalucía, afirmó, es que no sumaron. "Si suman las derechas, a partir del 20 de diciembre, quien va a ser presidente es Rajoy con los apoyos de Rivera", para después insistir en que "la única garantía de cambio para que Rajoy no sea presidente del Gobierno es el PSOE".

Iglesias arrancó el debate saludando al ausente Rajoy

En cuanto a Pablo Iglesias, tras saludar al presidente del Gobierno recordando que pasa el puente en Doñana: -"Nos está viendo desde Doñana, seguro que le interesa el debate"- tuvo que responder si el proyecto hoy de Podemos es el de hace un año, porque ha cambiado el criterio en algunos asuntos, según se le ha preguntado. "Estamos aquí para ganar", defendió, "y seguimos teniendo el mismo espíritu". El líder de Podemos se dirigió al gran número de votantes indecisos que indican las encuestas, a los que les dijo que su partido tiene "un programa para aplicar inmediatamente". Y advirtió de que puede ganar, porque nadie adelantó que lo harían ni Ada Colau en Barcelona ni Manuela Carmena en Madrid.

El líder de Podemos recalcó que España no es un sistema presidencialista, sino parlamentario, por lo que tiene que formar gobierno quien recabe más apoyos. Por eso, y aunque reconoció "el interés periodístico" de "hablar de sillones" cree que "es el momento de hablar de acuerdos", que se harán "sobre bases programáticas" y propuestas concretas. Así respondió cuando se le preguntó si apoyaría a Pedro Sánchez para que no siguiera Rajoy, aunque ganara el PP. Además, Iglesias también contestó que tiene la "impresión" de que cuando el PSOE está fuerte "se pone de acuerdo con el PP" y, en lugar de combatir las puertas giratorias, acaba modificando el artículo 135 de la Constitución. "Nosotros para lo que vamos a trabajar es para ganar las elecciones, se huele la remontada", remachó Iglesias, apuntando que "a lo mejor van a tener que ser otros" los que tengan que decidir si le invisten o no a él presidente.

Santamaría justifica la ausencia de su jefe de filas

Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, justificó su presencia en lugar de Mariano Rajoy, porque el PP es un equipo que comparte un proyecto, frente a partidos "personales y personalistas", dijo. Santamaría argumentó que el Gobierno y el PP han compartido responsabilidades y un proyecto y "cualquiera" de sus componentes podía estar esta noche defendiéndolo en el debate. "Se necesitan proyectos compactos", añadió. Lo que sí defendió es que tras las elecciones gobierne la lista más votada ante la posibilidad de que PSOE, Ciudadanos y Podemos acuerden "un tripartito de perdedores" para desbancar al PP.

Así, Sáenz de Santamaría, que dijo tener "miedo a los tripartitos de perdedores", no logró arrancar el compromiso que ha pedido a sus oponentes, a los que invitó a asumir también el principio de que gobierne la lista más votada. "Les oigo hablar de bipartidismo. Ojo, no sea que la sustitución del bipartidismo sea un tripartito de perdedores. Nunca ha funcionado bien en ningún lugar de España", repitió.

El ‘tripartito’, la amenaza fantasma de Rajoy en Doñana y argumento de Sáenz de Santamaría