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21 de febrero de 2011, 11:57
nuevatribuna.es | 17.02.2011
Aunque se ha escrito mucho sobre el llamado “fin de las ideologías”, un reciente estudio elaborado por la Fundación Alternativas demuestra que en España la ideología sigue siendo uno de los factores que más influye en la orientación del voto de los españoles en todas las elecciones que han tenido lugar durante el periodo democrático y sigue desempeñando un papel crucial en la vida política actual del país.
Irene Martín y Guillermo Cordero, politólogos de la Universidad Autónoma de Madrid son los autores del informe ¿Quiénes son y cómo votan los españoles de izquierdas?, una de cuyas principales conclusiones es que España es uno de los países europeos donde más ciudadanos se consideran de izquierdas, en torno al 37% de los mayores de 17 años y casi la mitad de ellos se autodefinen como socialistas. A ello se une que la inmensa mayoría se ubica en el espectro ideológico del centro izquierda (el 30% de los mayores de 17 años) mientras que el resto se ubica en posiciones más extremas, según el Eurobarómetro. Incluso, muchos ciudadanos de derechas se manifiestan claramente socialdemócratas en determinados temas. Es decir, los ciudadanos de centro se encuentran ideológicamente más cercanos al PSOE que al PP.
Aunque no hay que olvidar que en muchas ocasiones los españoles votan en función de la variante partidista (PSOE, PP u otras marcas políticas), lo cierto es que, a la hora de votar, dan más importancia a la ubicación ideológica de los partidos políticos en términos de izquierda-derecha que a la clase social a la que representan.
El hecho de que la mayoría de los españoles se ubique en posiciones de izquierda y centro izquierda responde al avance que tuvo el PP en los años noventa. Fueron los tiempos del llamado ‘giro al centro’ con el que José María Aznar consiguió sacudirse la imagen de partido de derechas vinculado al franquismo que había caracterizado a Alianza Popular. Sin perder nunca de vista a la ideología como factor de fondo, algo parecido le pasó al PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero, cuya llegada al poder en 2004 supuso el triunfo de las políticas sociales y de los derechos civiles. Cuatro años después, en las elecciones generales de 2008, la ideología tuvo de nuevo un papel protagonista en las urnas.
LOS VOTANTES DEL PSOE SE SIENTEN MÁS CERCA DE IU
El informe también estudia las relaciones entre votantes del PSOE y de Izquierda Unida para concluir que los primeros se sienten más cercanos de IU que al revés. Esto podría llevar a pensar que los socialistas pueden tener más dificultades a la hora de captar votos de la extrema izquierda que lo que puedan tener en IU para quitarle votos al PSOE por el centro izquierda. Sin embargo hay una variante a tener en cuenta. Y es que en ocasiones, los factores ideológicos se aparcan dando prioridad a cuestiones que se han venido en denominar como “voto útil” o el “miedo a la derecha” o a la propia situación interna de cada partido.
Si bien los votantes del PSOE e IU se sienten bastante cercanos en términos ideológicos, los socialistas son mayoritariamente de centro-izquierda mientras que los electores de IU se dividen a partes iguales entre la extrema-izquierda y el centro-izquierda. Aún así, los ciudadanos que se declaran de extrema-izquierda han ido votando progresivamente más al Partido Socialista Obrero Español.
Respecto a la abstención que castiga tradicionalmente a los partidos de la izquierda, disminuyó notablemente en las elecciones de 2004 y 2008, donde el PSOE logró una importante movilización.
Otra de las variantes a tener en cuenta, según este estudio, es que los ciudadanos que se declaran de centro tienen un comportamiento bastante volátil. Mientras en el año 2000, una parte importante de ellos votó al PP, cuatro años después volvió a dar su respaldo al PSOE en unas elecciones que estuvieron marcadas por la guerra de Irak y los atentados del 11M.
LA IZQUIERDA SE DIFERENCIA DE LA DERECHA EN CUESTIONES MORALES Y RELIGIOSAS
¿Y cuáles son los asuntos que diferencian a un votante de izquierdas a uno de derechas? Pues básicamente en cuestiones morales y religiosas tales como los derechos de los homosexuales, la igualdad entre hombres y mujeres la eutanasia, el aborto, el laicismo y la separación de Estado e Iglesia, así como con respecto a la memoria histórica de la Guerra Civil y el franquismo; en este sentido, el vínculo de los ciudadanos de izquierda con la República es más que evidente.
Los temas relacionados con la descentralización territorial del Estado, el nacionalismo y el terrorismo también son asuntos diferenciados en los espectros ideológicos de izquierda y derecha. En los comicios de 2008, los españoles que se mostraron más favorables al diálogo con ETA –e incluso los que no- se inclinaron por votar más al PSOE que al PP, pero también más a IU que al PSOE.
En algunos otros asuntos las diferencias no son tan notables. El estudio hace referencia a las políticas de inmigración y en concreto al rechazo a la regularización de los extranjeros, donde los votantes de izquierda se diferencian muy poco de los de centro. Lo mismo sucede con lo relativo a las políticas públicas. Uno de los aspectos más llamativos que refleja el estudio es que hay cierta resistencia por parte de la extrema izquierda a considerar necesarios los impuestos y a aceptar un aumento de los mismos para mejorar los servicios públicos, si bien, cabe pensar que dicha actitud tiene más que ver con la forma de gastar el dinero público por parte del Gobierno. A esto se añade que la extrema izquierda se muestra más partidaria de un mayor gasto en Seguridad Social y pensiones, así como en transportes públicos.
