sábado. 20.04.2024
portada hemisferios

Exactamente cincuenta años después del nacimiento de García Lorca, nació en Buenos Aires, un 5 de junio de 1948, Inés Iovanetti, otra “argentinita” que vive en España desde la muerte de Franco. No es cantante, ni actriz -aunque hizo sus pinitos en cortometrajes- como su paisana, Encarnación López Júlvez, la amiga del universal andaluz. Inés Iovanetti es poeta, como García Lorca, al que rinde homenaje en el libro “HEMISFERIOS, Tiempos del alma”, y al que une parte de su sangre.

Acaba de ponerse a la venta este libro, Hemisferios, con dos notas a destacar, muy originales:  Primera: muchos poemas llevan además del título en castellano, el título en guaraní, lengua de su abuelo materno que le contaba cuentos en ese idioma y que la nieta ha querido rescatar. Incluso el título del mismo, Tiempos del alma, figura así en su portada: “Irempo kuera ánga gua”, “en idioma Guaraní, lengua de hombre, en honor a mi abuelo materno”. También figura el título “en otras lenguas indígenas, en honor a mi país de nacimiento, la Argentina: Pacha A'jayu (aymará), Pacha Mulla (quechua), Tripantu Pë llü (mapurundum, mapuche), incluso italiano, Tempo dell'anima (en honor a mi abuelo paterno)”. 

Segunda: Acompaña al libro un disco (CD) con una selección de poemas entresacados del mismo, recitados y acompañados de música y efectos especiales que se puede adquirir junto al mismo, o independientemente, “rescatando de esta manera, según manifiesta el rapsoda, una tradición de milenios, pues la poesía nació para ser cantada y recitada, acompañada de un instrumento musical”, y, en esta obra, no sólo de música, sino de efectos especiales que dan un toque de profundidad al recitado, realizado con sencillez, pero de manera magistral.

Y todo ello envuelto en una portada, que en ambos casos, libro y disco, es una auténtica obra de arte, atractiva y sugerente. El libro dividido en dos partes que separan los poemas de juventud de los más recientes, escritos unos y otros en ambos hemisferios, norte y sur, de ahí su título, contiene en sus páginas centrales y divisorias, fotografías a color de rosas, metáfora de los versos, y dibujos de la autora, de profesión diseñadora.

“Con la poesía no se vive, aunque no se puede vivir sin poesía, por eso llevo escribiendo versos desde que mi madre, que era maestra, me quitó los “comics” y me regaló el libro de “Las Mil mejores Poesías de la Lengua Castellana”. Su lectura, cuando apenas contaba diez años, me incitó a imitar a esos autores, y de ellos aprendí mucho... Admiro a Lorca, Miguel Hernández, Machado... poetas que, es curioso, eran más conocidos en mi país que en España, ya sabemos la razón... en ese aspecto la República Argentina estaba mucho más avanzada que este país donde ahora vivo y donde me quedé porque aquí terminaba una dictadura mientras allá empezaba otra”, declara Iovanetti a NT.

Le ha da miedo publicar, porque es como abrir su corazón y sentimientos a gentes que no conoce. Nunca pensó en hacerlo, escribía por puro placer, y porque necesitaba expresar algo y dejarlo escrito para su permanencia en el papel cuando pasara el tiempo. Por eso muchos poemas se han perdido en su constantes viajes de juventud y traslados, algunos han sido rescatados después de treinta años; de todo ello queda constancia en este libro.

Un regalo ideal para toda la vida

Hemisferios, tiempos del alma, refleja la evolución de todo ser humano, y concretamente de cualquier mujer en su paso por la vida, desde sus años de amoríos y emancipación de la casa paterna, pasando por sus ilusiones de madre y preocupación por los hijos, hasta desembocar en la madurez de una mujer de nuestro tiempo con interés por su entorno, y por lo que sucede en el mundo, tanto grandes como pequeños acontecimientos, que marcan una época o concretamente a una familia, como las guerras, los desplazados y refugiados, o las desapariciones y asesinatos de jovencitas, como las tristemente famosas “chicas de Alcásser” o la niña gitana María de la Luz, a la que dedica un poema.   

No faltan tampoco homenajes a esos poetas cuyas ideas y cadencias embebió, ni a personajes importantes o situaciones de Latinoamérica y España, el país que libremente eligió para vivir y donde ha desarrollado casi toda su vida. Un país que la fascinó desde el principio, no en vano su abuela paterna proviene de Andalucía, cuyo descubrimiento le sumó nuevos enfoques a su escritura.

De esta mezcla de sangres, andaluza, italiana, y guaraní, se nutren sus versos. Que haya publicado es un regalo a nuestro idioma y a su acerbo poético, que últimamente parece estar en decadencia. Se quiere buscar una poesía nueva, y no surgen más que versos farragosos, prosa que parece poesía, y a la inversa. En fin, se publica una poesía que nadie lee porque no la entiende, o porque no le llega. Por eso la poesía no se vende, como piensan las grandes editoriales. A la gente no le gusta... Mentira. ¿No será que lo publicado mayormente como poesía no lo es? En este caso, ha habido mucha gente, sobre todo mujeres que han adquirido el libro, y se han sentido identificadas, les ha llegado, lo han devorado, y no han parado en elogios. “No sabía que la poesía fuera eso, y que se entendiera”, me han confesado. 

Un libro ideal para regalar y escuchar. Un regalo tan dulce como una caja de bombones, pero mucho más duradero. Y si el contenido es sublime, el continente es hermoso. Dos obras de arte, una envuelve a la otra como celofán celestial. Con él se ensancha el espíritu y se alimenta la emoción. Poesía nueva, acorde con los tiempos que vivimos, y a la par, enraizada en nuestra larga tradición lírica, donde no falta la rima, a veces imperceptible, la cadencia, la musicalidad, y el ritmo.  

A este volumen seguirá dentro de poco tiempo (“está casi terminada la selección con poemas recientes para la segunda entrega de estos Hemisferios”, nos confiesa la autora), la colección subtitulada “Cuadernos de Alma”, donde rescata los valores clásicos de la poesía española con un toque actual. En la espera de la siguiente obra, que es de suponer supere a esta de la que hablamos, aconsejo a los lectores que se acerquen a este poemario en la seguridad de que no les defraudará. Bienvenida esta poeta, Inés Iovanetti, de la que Nueva Tribuna ha publicado el año pasado varios poemas y artículos contra la guerra y en favor de la paz y la ecología. Bienvenido “uno de nuestros últimos valores poéticos en castellano”, como reza la contraportada del libro.

La poesía, regalo material y espiritual