El viernes 21 de octubre se celebrará el acto de homenaje -que coincide con la celebración del 104 aniversario de su nacimiento-, al que asistirá la hija del fotógrafo, Irenka Gyenes, en representación de la familia. En el transcurso del acto oficial se presentará la biografía escrita por Fernando Olmeda, recientemente traducida al húngaro y publicada por la editorial Méry Ratio.
Promovido por el club local de fotografía, se instaló recientemente en la casa natal de Gyenes (en la actualidad, un café) un memorial formado por dos fotografías (una, de Salvador Dalí con una imagen de Pablo PIcasso, y otra del propio Gyenes con Lady Diana Spencer), y dos cuadros firmados por el pintor Albert László, residente en París.
En la víspera (jueves 20), tendrá lugar la presentación oficial de la biografía en el Instituto Balassi de Budapest, dependiente del Ministerio de Cultura, que promueve la lengua y la cultura húngaras en el exterior. Está prevista la asistencia de representantes del Parlamento nacional, del Embajador de España, del Director del Instituto Cervantes de Budapest y de la hija del fotógrafo.
La versión en español de la biografía, publicada por la editorial Península, ya se presentó en el Instituto Cervantes de Budapest, donde se inauguró, simultáneamente, una muestra fotográfica.
En 2012, coincidiendo con la conmemoración del centenario de su nacimiento y como una de las grandes propuestas del Tricentenario de la institución, la Biblioteca Nacional de España presentó la exposición antológica "Gyenes. Maestro fotógrafo", comisariada por el propio Olmeda e inaugurada por la Reina Sofía.
Juan Gyenes Reményi (Kaposvár, 1912 - Madrid, 1995) ocupa un lugar preferente en la historia de la fotografía de la segunda mitad del siglo XX. Fue un admirado retratista, un peculiar cronista social y un activo difusor de la cultura española. Documentó todas las manifestaciones artísticas de lo español: danza, teatro, música, literatura, pintura, moda... En sus fotos, vinculadas al momento histórico en que fueron realizadas y reconocibles por su original firma, lograba detener el tiempo con certera maestría. Su técnica y su magisterio hicieron inconfundible su trabajo. Artista con mayúsculas, aportó a la fotografía española una mirada nueva. Realizó su trabajo con talento y, sobre todo, admiración respetuosa hacia la tierra que lo adoptó.
