martes. 19.03.2024
legumbres

La Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) ha proclamado 2016 Año Internacional de los Legumbres (AIL), y designado la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) para que lo promueva en colaboración con gobiernos, organizaciones no gubernamentales y otras entidades. Se trata de concienciar a la sociedad de las ventajas nutricionales de las legumbres y de su contribución a una producción sostenible y suficiente de alimentos.

En España el consumo de legumbres está en retroceso desde hace años y se sitúa alrededor de 3 kilos por persona año, y a escala mundial el consumo es bajo. Una tendencia que se pretende revertir a través de la educación y de la sensibilización, especialmente este año 2016. En Cataluña, por ejemplo, la ingesta es algo superior, unos 3,65 kilos por persona y año, pero con tendencia a la baja. La ONU recomienda que deberíamos comer más legumbres, entre 2 y 4 raciones a la semana, es decir, un promedio de entre 20 y 40 gramos diarios, lo que representa elevar el consumo anual a alrededor de 10,5 kilos por persona y año, lo que equivaldría prácticamente a triplicar el consumo actual.

Las legumbres son alimentos tradicionales que "se están perdiendo" en la dieta actual, tienen poco prestigio social, en gran parte porque se asocian a tiempos de escasez, y no hay un mercado "gourmet" que les de valor, aunque esto está mejorando. El tiempo que supone su cocinado tampoco favorece el consumo, pero esto no es excusa, porque muchos establecimientos venden grano cocido, y también encontramos en el mercado platos preparados y conservas de calidad, se podría facilitar el consumo con nuevas presentaciones.

Desde el punto de vista nutricional, las legumbres aportan una cantidad moderada de calorías, proteína de buena calidad, almidón, poca grasa (excepto la soja), bastante fibra, y cantidades significativas de minerales y vitaminas. Una propiedad interesante es que sus hidratos de carbono (almidón) se absorben lentamente (es lo que se llama tener un índice glucémico bajo), lo cual es buena para todos, y más para los diabéticos. También ayudan a bajar el colesterol y combatir el estreñimiento. No contienen gluten y los celíacos las pueden consumir. Su coste hace que sean unos alimentos con una excelente relación precio / valor nutritivo.

España es un país "deficitario", por lo que convendría seguir aumentado la producción, para paliar la necesidad de importar 140.000 toneladas cada año. Según los datos del Magrama, la superficie de leguminosas en España era en 2014/2015 de 275.000 hectáreas, un 20% más que en la campaña anterior, mientras que la producción se redujo un 10% hasta quedarse en las 220.000 toneladas.

La revista Food Technology incluye en su número del pasado mes de enero, con motivo de este año internacional, una monografía en la que sintetiza el interés de las legumbres y el de promover su cultivo, ya que, de hecho, producen su propio fertilizante, por lo que requieren menos gasto en energía y tienen un impacto ambiental menor que otros cultivos y producciones ganaderas. Por esta razón, las campañas tienen que incidir no sólo en los beneficios de su consumo, sino también de su cultivo.

Tenemos en España diez legumbres que han conseguido marcas de calidad diferenciada, las Denominaciones de Origen de los Fesols de Santa Pau y la Mongeta de Ganxet, y ocho Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP): Alubia de La Bañeza-León, Faba Asturiana, Faba del Lourenzá, Garbanzo de Escacena, Garbanzo de Fuentesaúco, Judías de Barco de Ávila, Lenteja de Armuña y Lenteja de Tierra de Campos, y otras muchas legumbres de calidad  (Guisante de Llavaneres, el Guisante Negro del Berguedà, el Garbanzo de Oristà, …). El escritor Josep Mª Espinàs ha dicho con razón: "¿Quién negará, de todos modos, que las proteínas vegetales y otras sustancias de las legumbres secas históricamente han asegurado la supervivencia diaria de muchísima gente que no tenía posibilidades de diversificar la alimentación?".

logo-triptolemosFundación Triptolemos para el desarrollo agroalimentario desde el 2002 colabora en la optimización y articulación del funcionamiento del sistema alimentario, para que redunde en una mayor disponibilidad y calidad de los alimentos, en la confianza y dignificación, en un entorno de sostenibilidad global, en la convicción de que no puede haber un desarrollo sostenible y equilibrado socialmente si, en la base, el sistema alimentario global no mantiene el equilibrio entre sus actores.

Así pues, bienvenidas sean todas las acciones de concienciación (opinión pública, escuelas, familias, productores, investigadores, distribuidores…..) sobre las ventajas nutricionales del consumo de legumbres y de favorecer su producción como alimentos sostenibles. Para nuestra salud y la del planeta, conviene que comamos legumbres, en el marco de una dieta variada, y por muchos años, no sólo en 2016.


Abel Mariné | Profesor emérito de Nutrición y Bromatología.
Facultad de Farmacia, Campus de la Alimentación. Universidad de Barcelona
Miembro de Fundación Triptolemos para el Desarrollo Agroalimentario

Diez legumbres españolas con denominación de origen