martes. 23.04.2024
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Texto y fotos: Raúl García Sosa | pixabay.com

El Código IBAN se utiliza para identificar a nivel internacional una cuenta bancaria concreta. Vio luz con el propósito de que los bancos pudieran ejecutar de forma automatizada las transferencias con otras entidades bancarias similares del continente europeo (países considerados miembros de la Unión Europea). 

Con carácter previo al nacimiento de tal normativa, se podían tener bastantes dificultades en el momento de llevar a cabo los pagos a escala internacional. Ello es debido a que los sistemas de identificación de cuentas eran solamente de España, lo que hacía que fuese casi imposible poder identificar la nación en la que estaba abierta una cuenta determinada. 

 Tal acepción proviene  de las siglas iniciales en inglés de la norma IBAN (International Bank Account Number), y fue promovido por el ECSB, el Comité Europeo de Estándares Bancarios.

 Algunos bancos facilitan a sus clientes calcular su propio código de forma sencilla en sus páginas de internet, como por ejemplo en el caso de la calculadora del Banco Santander.

El Código IBAN incorpora cuatro dígitos a la cuenta corriente (que ya cuenta con veinte en su haber). Fue en febrero de 2014 cuando dejó de estar reconocida con las familiares CCC (el Código Cuenta Cliente). 

Tales cuatro signos serán: 

  • ES – en el caso de España
  • Dígito de control de dos cifras

A este identificador hay que añadir el BIC (Bank Identifier Code). Se trata de un código que caracteriza a la entidad bancaria vinculada con la cuenta emisora. 

Está formado por once dígitos y completa al IBAN. 

El BIC sirve para identificar al banco que se beneficia de una determinada transferencia.  

Se trata del código empleado por las entidades asociadas al sistema SWIF, utilizado frecuentemente para efectuar distintos pagos a nivel mundial. 

En él, cada entidad o banco están señalados por un código que debe contener entre ocho y once caracteres. Su composición es la siguiente: 

  • 4 dígitos iniciales: identifican al código del banco.
  • Dígitos 5 y 6: referentes al código ISO del país.
  • Dígitos 7 y 8: señalan la localidad.

En algunas ocasiones, se utilizan también otros tres, relativos a la sucursal.

No obstante, lo más común es encontrar su composición formada por estos ocho caracteres.

  • Ventajas de utilizar IBAN
  • Permite que disminuyan los costes asociados.
  • Posibilita que se limiten los errores. Hablamos de un campo que tiene una validación de tipo mecánica.

Los datos pertenecientes a la cuenta del beneficiario están clasificados de forma correcta y sin errores algunos. 

  • Simplifica el tratamiento a mano de las operaciones. 
  • Facilita la automatización de procesos.

Este código incide en la SEPA, que dictará en qué naciones se podrán ejecutar  las transacciones

La Single Euro Payments Council (SEPA) se refiere a la conocida como “Zona única de Pagos en Euros”. Está compuesta por los veintiocho países miembros de la UE, a los que hay que incorporar a Noruega, Suiza, Liechtenstein e Islandia. 

La SEPA permite que agentes económicos, las distintas compañías empresariales y los  ciudadanos pobladores del continente lleven a cabo sus operaciones en la vieja Europa.

El código IBAN: garantía de seguridad en las transferencias bancarias