“La cultura ecológica se ha extendido en España en los últimos años de forma progresiva. Incluso en los años de crisis económica el consumo de estos productos ha crecido de forma imparable”
SuperSano, la primera cadena de supermercados ecológicos de España con establecimientos propios en Valencia, Alicante, Murcia, Albacete, Elche y Altea, abre el próximo viernes 16 de enero su primera tienda en Madrid, en el número 86 de la calle Hermosilla.
El modelo responde a un nuevo concepto de supermercado que incluye todo lo necesario para la alimentación y el hogar dentro de la llamada ‘cultura ecológica’. Una denominación que ampara el compromiso por un estilo de vida que se apoya en la ecología, la seguridad alimentaria, el bienestar físico de las personas y el respeto y cuidado por el medio ambiente.
Sus establecimientos cuentan con las secciones habituales de cualquier supermercado convencional: panadería, frutas y verduras, carnes, lácteos, snacks, bebidas y limpieza, y todos sus productos ecológicos están sellados y certificados por los organismos oficiales correspondientes de las regiones y países donde son producidos o envasados. Dispone también de herboristería y cosmética natural y una zona específica para celíacos con toda clase de productos sin gluten, así como otros alimentos especiales para personas con otros tipos de intolerancia alimentaria.
En total cuenta con más de 3.000 referencias distintas, nacionales y de importación, de los productos denominados ecológicos, bio y orgánicos.
“Desde el primer momento nos dimos cuenta de que si conseguíamos bajar los precios, muchas más personas consumían productos ecológicos; y ése es nuestro reto y nuestra misión, llegar al máximo posible de consumidores”
Con la apertura de Madrid, se consolida como la primera empresa de distribución de productos ecológicos de España por ámbito geográfico, ya que está presente en cinco provincias. Además, para 2015 está prevista la apertura de al menos tres nuevas tiendas en otras ciudades.
Según Susana Sánchez, responsable de atención al cliente, “la cultura ecológica se ha extendido en España en los últimos años de forma progresiva. Incluso en los años de crisis económica el consumo de estos productos ha crecido de forma imparable”.
El éxito está basado en haber conseguido acercar los precios de los productos ecológicos a los precios de los productos convencionales. Con su Tarjeta Descuento, la cesta de la compra en SuperSano supone un ahorro lineal de entre el 10% (alimentación bío), el 15% (cosmética natural) y el 25% (herboristería) en todos los productos, de todas las marcas.
“Desde el primer momento -señala Sánchez- nos dimos cuenta de que si conseguíamos bajar los precios, muchas más personas consumían productos ecológicos; y ése es nuestro reto y nuestra misión, llegar al máximo posible de consumidores”.
SuperSano comenzó su andadura en plena crisis, abriendo su primera tienda en la ciudad de Alicante en el año 2009. Dos años más tarde, una vez consolidado el modelo de tienda en forma de supermercado autoservicio y con precios muy ajustados, abrió en Murcia, y más tarde, ante el éxito registrado, inició un plan de expansión que alcanza este año a Madrid.
La definición de los productos ecológicos está perfectamente plasmada en este decálogo de SuperSano que ya se ha convertido en la biblia ecológica de las redes sociales:
Panadería y repostería
Sin conservantes, colorantes ni transgénicos
Frutas y verduras
Sin herbicidas, pesticidas ni fertilizantes químicos
Lácteos y huevos
Sin piensos artificiales ni residuos industriales
Carne fresca y embutidos
Sin antibióticos ni hormonas del crecimiento
Tofu y alimentos para vegetarianos
Sin materias primas de origen animal
Alimentos de régimen
Sin gluten, sin azúcar, sin grasas hidrogenadas
Herboristería, plantas medicinales
Sin contraindicaciones ni reacciones adversas
Productos de higiene y limpieza
Sin sustancias contaminantes del medio ambiente
Belleza y cosmética natural
Sin parabenes ni experimentos con animales
En los últimos años están teniendo un auge muy importante las secciones especialmente dedicadas a productos frescos. Es decir, la fruta, la verdura, la carne, los lácteos, las 12 clases distintas de pan, y los platos preparados, listos para consumir.
Lógicamente, todos los productos ecológicos están sellados y certificados por los organismos oficiales correspondientes, de las regiones y países donde son producidos o envasados.
