martes. 16.04.2024
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Todo indica que tenemos un escenario de pluralidad y eso es bueno para la democracia; la polarización no es buena para nadie

No fue una buena experiencia y sería conveniente modificar la norma al respecto, la realización simultánea de elecciones al Congreso de la República y de consultas de los partidos políticos o de coaliciones de partidos, para escoger sus candidatos a la Presidencia, porque confunde a los electores y adicionalmente, como sucedió el pasado 11 de marzo, las consultas terminan invisibilizando las elecciones de Congreso, que son las más importante.

La verdad, la polarización derecha-izquierda señalada por ciertos medios no es real; como lo señaló Antonio Navarro y se comprueba con las cifras, las dos consultas suman un poco más de nueve millones de votos y el total de votantes superó los diecisiete millones lo cual señala qué hay una cifra de más de ocho millones que en esa lógica habría que situarlos como de centro y que realmente sería la mayoría -no serían ni de Duque ni de Petro-, sin considerar que esas consultas las inflaron votantes por distintas razones. Para la campaña presidencial tenemos un juego abierto para los cincos principales candidatos y dependerá de lo que hagan en estos dos meses de campaña.

Una reforma electoral debe contemplar una fecha diferente, como de hecho estaba previsto, pero el Consejo Nacional Electoral aceptó que determinados partidos políticos modificaran la fecha y se superpusieran con las elecciones de Congreso y que debe ser obligatoria para todos los partidos políticos que quieran hacer consultas y debe haber un solo tarjetón para todas las consultas que haya, similar al tarjetón para todas las listas del Congreso y no esa diferenciación por consulta, que es por lo menos sospechosa.

Las elecciones de Congreso no mostraron la aparente polarización entre izquierda y derecha, que algunos medios quisieron presentar a la sociedad, quizá con otros intereses

Pero adicionalmente a eso, hay que decir que las elecciones de Congreso no mostraron la aparente polarización entre izquierda y derecha, que algunos medios quisieron presentar a la sociedad, quizá con otros intereses.

Lo que realmente muestra la composición del Congreso, antes que una supuesta sociedad polarizada, es una sociedad con posiciones políticas diversas, con matices y eso es muy saludable para la democracia. Si vemos la composición del Senado tenemos que no hay ninguna fuerza política que hegemonice, ni siquiera un acuerdo entre las tres fuerzas políticas con mayor número de senadores (Centro Democrático con 19, Cambio Radical con 16 y Partido Conservador con 15) pueden elegir mesas directivas del Congreso y menos lograr mayorías para aprobar iniciativas legislativas, en total estos tres partidos políticos, que pueden reflejar el espectro desde la derecha, hasta la centro-derecha, suman 50 Senadores. Recuerden que tendremos un Senado de 108 Senadores con los cinco del partido político Farc, producto del Acuerdo de Paz con esta insurgencia y el candidato presidencial que pierda en segunda vuelta, de acuerdo con el Estatuto de Oposición vigente.

Igualmente debemos destacar, dentro de esa lectura de pluralidad que refleja el nuevo Congreso, que las fuerzas políticas de centro-izquierda representan la cuarta parte del Senado (Alianza Verde 10 Senadores, Polo Democrático Alternativo 5 Senadores, los Decentes 4 Senadores, los 5 Senadores del partido Farc, los dos Senadores indígenas que casi siempre votan con este grupos), lo que significa que las tareas de control político de este grupo pueden ser de importancia.

Todo indica que tenemos un escenario de pluralidad y eso es bueno para la democracia; la polarización no es buena para nadie.


Alejo Vargas Velásquez | Profesor Universidad Nacional | Artículo publicado en Alainet

Elecciones de congreso en Colombia: ¿polarizacion o diversidad política?